LA CASA DEL SOL - RASAL MÁGICO

Por el compromiso a la humanidad y por el apoyo constante de los hermanos de las estrellas nos comprometimos con la invitación.
Cumplidos los proyectos que teníamos en Rasal y La Casa del Sol, fuimos preparándonos para estos viajes, por el momento a los lugares que por indicación de los seres de las estrellas debíamos visitar.
La montaña de Montserrat debía ser nuestra primera parada de este viaje que por España íbamos a realizar. Allí, como en otros lugares de poder, nos serían entregados códigos activadores, códigos energéticos para nuestro crecimiento personal y humano. Códigos que nos ayudarán a comprender nuestra función cósmica en esta existencia.
Nos pusimos en marcha y tras organizarnos, hicimos el llamado a todos aquellos que en su corazón sintieran participar de este encuentro de meditación y contacto para los días 24, 25 y 26 de julio de 2015.
Llegada la fecha nos reuníamos un pequeño grupo de personas a los pies de la Basílica de Montserrat. Punto que tomaríamos de partida en cada una de las salidas que se realizaron a lo largo del fin de semana.
Estuvimos meditando en la Santa Cova, el lugar donde supuestamente se encontró la figura de la Virgen de Montserrat, tras la experiencia de unos pastores y unas “extrañas luces” que día a día descendían sobre una explanada de la montaña de Montserrat.
En la meditación, se nos hizo entrega por parte de los seres intraterrenos de Montserrat, de una especie de pergamino con una clave activadora de nuestro camino personal.
Al terminar esta meditación recibí los siguientes mensajes:

“Cada uno de ustedes forma parte de ese plan divino en el que todos son sentimos unidos. Allí o aquí se abren las puertas para una nueva conexión, una nueva oportunidad de crear un mundo de paz en el que todos los seres vivos del universo puedan compartir sus experiencias de vida.
Nunca antes estuvimos más cerca, nunca antes se hizo tan imprescindible la voluntad y el amor de ustedes hacia la vida y sus congéneres. Nunca antes nos sentimos tan humanos.”
La Gran Hermandad Blanca Intraterrena de Montserrat.”

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“El proceso ya ha comenzado. El plan será llevado a término y cada uno de ustedes recordará dónde y cuándo debe situarse, alinearse con la energía de sus seres para que el fruto de su destino sea cumplido.
Desde las estrellas les acompañamos y así será siempre. Cada uno en su lugar será consciente de su rol en este proceso de elevación cósmica, que como bien sabe no sólo involucra a la humanidad de la Tierra sino a todas las humanidades del universo.
Esta tarde sembrarán los cristales del amor en su mundo. El compromiso de lo pactado comienza aquí y ahora. La unidad y comunión de los pueblos de la Tierra y las estrellas debe ser punto de luz, amor y paz.”
Con AMOR, Antarel.”

La siguiente salida fue a la ermita de San Miguel (patrón de la Montaña de Montserrat) justo en el día que se celebraba el patrón de España, Santiago Apóstol, el 25 de julio. Allí fue desde donde hicimos el trabajo de siembra de “Cristales de Amor”. Ciertamente no había otro lugar ni momento más propicio para ello.
Para quienes desconocen este tipo de trabajos, decir que estos cristales son materializaciones energéticas en forma de pirámides, en este caso con energía rosa, de amor incondicional. Entre todos, incluidos los que no estaban presentes físicamente en Montserrat, fuimos aportando al centro del grupo esta energía, creando estas pirámides para luego “sembrarlas” en tierra, en los lugares indicados y que desde allí, puedan irradiar la energía de la que están hechas a todo el planeta.
Uno de los cristales, como es lógico pensar, lo sembramos en la misma ermita de San Miguel. El otro lo sembramos sobre la montaña de Monte Perdido, tras lo cual procedimos a enlazarlos energéticamente para que uno al otro se retroalimenten energéticamente de esta energía rosa y del poder interior de cada uno de estos lugares.
El domingo por la mañana ascendimos a la cima de la montaña con el tren cremallera y nos dirigimos a la ermita de San Juan, donde terminamos el encuentro realizando una proyección al planeta. Envolvimos a Gaia en energía e irradiamos paz y amor a todos los seres vivos que en nuestro querido mundo habitamos.
Nunca estuvimos solos. En todo momento estuvimos acompañados de todos los seres de luz que de corazón quisieron participar en este proyecto de luz, amor y paz. Gracias a todos por ser y estar.
Nuestro próximo destino: Septiembre de 2015... Monte Perdido.
Un abrazo de corazón.

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